24/10/2022
Bajo el lema
El devenir del canto primitivo andaluz, la programación de esta nueva edición de los Encuentros Manuel de Falla estará dedicada a conmemorar los 100 años de la celebración del I Concurso de Cante Jondo, recordando también dos importantes centenarios como son el de la muerte de Felipe Pedrell y el de los conciertos que ese año tuvieron lugar en el Hotel Alhambra Palace.
No es casual que la programación se haya presentado en el Teatrillo del Alhambra Palace donde, un 7 de junio de 1922, tuvo lugar la fiesta en la que Antonio Gallego Burín leyó el texto El “Cante Jondo” (canto primitivo andaluz). Sus orígenes, sus valores musicales, su influencia en el arte musical europeo -anónimo por voluntad de los organizadores, aunque hoy sabemos que fue escrito por Manuel de Falla-, Federico García Lorca leyó algunos fragmentos de su Poema del Cante Jondo, y todo ello acompañado por las guitarras “en el viejo estilo andaluz” de Manuel Jofré y de Andrés Segovia.
Ese mes y en el mismo teatrillo, se celebró un concierto de cantos populares ingleses, que contó con las palabras del director de la revista londinense Fanfare, y del director de la Schola Cantorum de Nueva York. Ursulla Greville cantó acompañada al piano por Kurt Schindler y Manuel de Falla.
También en el Hotel Alhambra Palace, unos meses después, la gran clavecinista Wanda Landowska ofreció dos recitales de clave. El encuentro entre Wanda Landowska y Manuel de Falla marcó un giro decisivo en la música de Falla, que dio sus frutos entre otras obras en El retablo de maese Pedro y, sobre todo, en el Concerto per clavicémbalo (o pianoforte), flauto, oboe, clarineto, violino e violoncello, que han dejado su huella en la historia de la música occidental del siglo XX.
Felipe Pedrell (1841-1922), padre del nacionalismo musical español, contó con destacados discípulos como Manuel de Falla, Isaac Albéniz, Enrique Granados, Joaquín Turina o Roberto Gerhard. El interés de Pedrell por la música de los gitanos de España le llevó a proponer a Manuel de Falla en 1902 la composición de La vida breve, con un argumento gitano. Gracias a su influencia, Manuel de Falla apostó en una primera etapa por la utilización del canto popular, que propició la organización del Concurso de Cante Jondo, y se centró a partir de entonces en la utilización de la música histórica española, impulsando el uso del clave de la mano de Wanda Landowska.
Programación de los 28 Encuentros Manuel de Falla
disponible aquí.